A lo largo de su carrera Christina Aguilera ha cosechado multitud de premios y grandes éxitos. Tiene una legión de fans que la sigue a cada paso que da, pero ahora se ha descubierto también la dudosa forma con la que ayudó a la patria tras los atentados del 11-S. Según ha publicado un reportaje el diario ‘New Yorker’, la CIA utilizaba las temas de Aguilera para torturar durante horas a los terroristas detenidos en Guantánamo.
Canciones como ‘Genie in a Bottle’, ‘What a Girl Wants’, ‘I Turn to You’ o ‘Come On Over Baby’ eran puestas durante horas a los detenidos para intentar sacarles algo de información. Eran temas del primer álbum de una jovencísima ‘X-Tina’ en su faceta más provocadora. No es ningún secreto que la CIA utilice la música como tortura, pero ahora sorprende que fuera Christina Aguilera una de las elegidas.
El reportaje de ‘New Yorker’ se titula ‘The Sound of Hate’, lo que se traduciría al castellano como ‘El sonido del odio’. Ahí el periodista Alex Ross pone de ejemplo el caso de Mohammed al-Qahtani, quien fue acusado de intentar entrar en Estados Unidos para participar en los atentados terroristas. La CIA, tras no lograr la confesión por las buenas, le obligaba a mantenerse despierto durante horas escuchando la música de Christina Aguilera. Sólo podía ir a descansar tras declarar.
En el texto se detalla que esta tortura era muy efectiva por la imposibilidad del preso para evitarla. “Uno puede cerrar los ojos para no ver algo, pero no puede cerrar los oídos”, explica Ross. Al mismo tiempo detalla que las canciones de Aguilera fueron seleccionadas al pensar que podían “ofender a los detenidos islámicos”.
Aunque Christina Aguilera no era la única “afortunada” que ayudaba a la CIA. Los agentes también variaban un poco el set-list incluyendo canciones como ‘No More Mr. Nice Guy’ de Alice Cooper o ‘You Shook Me All Night Long” de ACDC. Los temas de rock, heavy metal y rap con mensajes de intimidación y destrucción también cumplían con los requisitos de tortura.
Creditos para La Vanguardia.-
